Mi equipo Trendy, en los Latin Grammys 2019.

A pesar de ser una de las experiencias más gratificantes que he vivido, puedo decirles que estos shows generan gran estrés. Cuando trabajas en shows en vivo, como estilista jamás puedes perder la calma, compostura y diplomacia. Debes estar siempre abierto a imprevistos y solucionarlos de la mejor manera posible. Es importante saber que un estilista no trabaja solo, por lo contrario el estilista se apoya en un gran equipo de profesionales involucrados, quienes están dispuestos a dar lo mejor de sí para alcanzar el resultado final.

 Entre estos están los productores, directores del show, maquillistas, estilistas de pelo, talento, management, etc. Por siempre haber cambios de última hora, la clave al éxito esta en un ambiente de plena organización con un equipo que sabe exactamente su tarea y espacio dentro del laberinto que es una producción de este tipo. 

Cada proyecto es único. Todo resultado final viene de un trabajo en equipo. Desde la idea creativa, los conceptos, el set, la coreografía y la música. En cada show, el artista debe ser el protagonista pero los bailarines que lo acompañan deben ser parte de una historia que se quiere transmitir. Después de tener una muy buena idea del look del artista, busco las tendencias del momento y las mezclo con algo de street style internacional. Los looks de escenario son totalmente diferentes a los de alfombra roja o a los de video musicales. La creatividad se convierte en una necesidad ya que se tiene usar al máximo para desarrollar vestuarios que transmitan una idea nueva e impactante con la esencia de cada uno de los artistas involucrados, sin perder el DNA de cada uno de ellos, ni el concepto del show en general.